El pasado lunes 26 de Noviembre, el Delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, fue invitado por el Congreso Nacional de Medio Ambiente, CONAMA 2018, para presentar la proposición para reducir la exposición de la población y el medio ambiente a los disruptores endocrinos fue aprobada el 28 de junio de 2017 por el Pleno del Ayuntamiento de Madrid.

Las sustancias químicas que presentan actividad como disruptores endocrinos, una vez incorporadas en el organismo, interfieren en el funcionamiento del sistema hormonal imitando la acción de las hormonas naturales, bloqueando su acción, o provocando el aumento o disminución de sus niveles, generando disfunciones orgánicas y sus patologías relacionadas, que se corresponden fundamentalmente con procesos de disfunción hormonal, alteraciones metabólicas y cánceres especialmente de tipo hormono-dependientes. En base al estado actual del conocimiento en relación con estas sustancias, nadie pone en duda que se trata de sustancias perjudiciales para la salud y debemos limitar su exposición a la población.

En un informe publicado en 2013 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) se aviso acerca de unas 800 sustancias químicas sospechosas de actuar como disruptores endocrinos. El abanico de sustancias que pueden presentar esta actividad es muy amplio, contando con sustancias tan diversas como dioxinas y furanos, PCBs, bisfenoles, ftalatos, hormonas sintéticas utilizadas en el engorde del ganado, productos fitosanitarios, biocidas, metales pesados, incluso ciertos conservantes presentes en productos cosméticos, entre otros.

Esta amplia variedad de sustancias hace que los disruptores endocrinos forman parte de nuestro día a día, y los podemos encontrar en gran variedad de productos de consumo humano habitual, como insecticidas, productos de limpieza, productos de higiene personal, materiales plásticos, incluso en juguetes…

Es por esto que, el necesario control de estas sustancias, se encuentra con problemas importantes  relacionado con:

  • la amplia distribución de estas sustancias,
  • la actual ausencia de regulación normativa y
  • la escasa información/conocimiento de la población.

 

El Ayuntamiento de Madrid, a través de Madrid Salud, conocedor de esta problemática y a iniciativa de plataformas sociales representados por Ecologistas en Acción y Fundación Alborada ha elaborado una iniciativa enmarcada dentro de la estrategia de ciudades libres de disruptores endocrinos, entre las que se encuentran ya varias ciudades europeas y españolas.

La proposición para reducir la exposición de la población y el medio ambiente a los disruptores endocrinos fue aprobada el 28 de junio de 2017 por el Pleno del Ayuntamiento de Madrid.

Las medidas que contemplan esta proposición comprenden

  • La limitación de utilización de determinadas sustancias,
  • La reducción de la exposición a estas sustancias por parte de la población más sensible,
  • La propuesta de una regulación normativa y
  • La información y sensibilización ciudadana.

 

En concreto, el Ayuntamiento de Madrid se ha comprometido a:

  1. Limitar el uso en espacios públicos de productos fitosanitarios y biocidas que contengan sustancias químicas susceptibles de actuar como disruptores endocrinos, afectando, en una primera fase, a 26 productos fitosanitarios y 5 productos biocidas.
  2. Limitar el uso de sustancias químicas susceptibles de actuar como disruptores endocrinos en otros contratos y compras públicas, estableciendo especificaciones técnicas que presenten la limitación del uso de determinados productos y sustancias químicas en las clausulas ambientales de los contratos municipales relacionados con actividades de limpieza y mantenimiento de edificios.
  3. Reducir la exposición a disruptores endocrinos a través de la alimentación, mediante:
    1. Fomento de dietas saludables basadas en la estrategia NAOS.
    2. Fomento del consumo de alimentos ecológicos.
    3. Limitar uso de envases que contengan bisfenol-A, ftalatos y otros disruptores endocrinos.
    4. Promover buenas prácticas de procesado de alimentos.
  4. Informar a la población sobre los riesgos de los disruptores endocrinos, las principales fuentes de exposición de la población y sobre cómo reducir esta exposición, mediante: actividades informativas y formativas dirigidas preferentemente a los profesionales en contacto con familias, jóvenes, niños y adolescentes, educadores, monitores de tiempo libre o periodistas; y actividades de información y sensibilización dirigidas a la ciudadanía, en particular a los grupos de población más vulnerables (menores, ancianos, enfermos, embarazadas).
  5. Instar a la Comunidad de Madrid a la adopción de medidas de reducción de la exposición a disruptores endocrinos como las incluidas en esta moción, así como a la Administración Central en la adopción de políticas para reducir la exposición de la población y el medio ambiente a disruptores endocrinos y la defensa de la prohibición urgente de estas sustancias a escala Europea.